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"Solo dos legados duraderos podemos aspirar a dejar a nuestros hijos: uno, raíces; otro, alas" (Hodding Carter)

sábado, 12 de noviembre de 2011

Masturbación en la infancia

Definición
La masturbación es la estimulación de los propios genitales para obtener placer y satisfacción. Los niños pueden frotarse los órganos genitales con un objeto o con la mano. La masturbación es algo más que la inspección normal de los genitales, observada comúnmente en los niños de dos años de edad mientras se bañan. Durante la masturbación, el niño generalmente tiene un aspecto aturdido, ruboroso y absorto. Un niño puede masturbarse con una frecuencia de varias veces al día o sólo una vez a la semana y suele hacerlo cuando está aburrido, soñoliento, viendo la televisión o bajo estrés.

Causa
La masturbación no tiene causas médicas. La irritación en el área genital produce picor o dolor, pero tampoco es su causa. La masturbación ocasional es un comportamiento normal de muchos niños de edad preescolar. Hasta un tercio de los niños de este grupo de edad la descubren mientras exploran sus cuerpos. A menudo, siguen haciéndolo simplemente porque les causa placer. Algunos niños se masturban frecuentemente porque están insatisfechos por algún motivo, tal como el hecho de que les hayan quitado el chupete. Otros están reaccionando al castigo, o a la presión que tienen que soportar para que dejen la masturbación por completo.

Curso previstoUna vez que su hijo o hija descubra la masturbación, rara vez abandonará la práctica totalmente. Es posible que no lo haga con tanta frecuencia si se resuelven las circunstancias asociadas de conflicto o de insatisfacción. A los 5 ó 6 años de edad, casi todos los niños pueden adquirir un poco de discreción y sólo lo harán en privado. En la pubertad, la masturbación se vuelve casi universal, en respuesta a los aumentos bruscos -y normales- de las hormonas y al impulso sexual.

Para evitar algunos conceptos erróneos:La masturbación no causa ningún daño físico ni lesión al cuerpo, no es anormal ni excesiva a menos que se haga premeditadamente en lugares públicos después de los 5 ó 6 años de edad y no significa que su hijo será promiscuo, desviado o demasiado susceptible a la excitación sexual. Sólo si los padres o educadores reaccionan de forma exagerada a la masturbación infantil y la consideran como algo perverso o sucio, ésta podrá ocasionar daño emocional, sentimientos de culpa y complejos sexuales.
¿Cómo deben comportarse los padres respecto a la masturbación infantil?
- Tenga objetivos que se puedan alcanzar. Es imposible eliminar la masturbación. Acepte el hecho de que su hijo ha aprendido a practicarla y que le gusta. Lo único que puede hacer es controlar el lugar donde lo hace. Un objetivo razonable es permitirla solamente en su habitación y en el baño. De otro modo, si pasa por alto totalmente, su hijo pensará que puede hacerlo libremente en cualquier sitio.

- No haga caso de la masturbación a la hora de la siesta y a la hora de irse a dormir por la noche. Deje tranquilo a su hijo en estas ocasiones y no siga vigilándolo. No le prohiba que se acueste sobre el abdomen y no le pregunte si tiene las manos entre las piernas.

- En las demás ocasiones, distraiga a su hijo con un juguete o con alguna otra actividad. Si esto no funciona, tenga paciencia. Usted puede decirle, con calma, a su hijo: "Está bien que lo hagas en tu cuarto o en el baño, pero está mal si lo haces en otro lugar de la casa o cuando estés delante de otras personas". Cuando los niños tienen 4 ó 5 años de edad, se vuelven sensibles a las opiniones de los demás y entenderán, entonces, que sólo deberían masturbarse cuando estén solos.

- Discuta este enfoque con el personal de la guardería. Pídale a la maestra o a la persona encargada de cuidar a su hijo que trate primero de distraerlo. Si esto no da resultado, deberá llamar la atención del niño con comentarios tales como: "Ahora necesitamos que vengas con nosotros".
- Aumente la relación y el contacto físico con su hijo. Algunos niños se masturbarán menos si reciben abrazos y mimos adicionales. Procure que su hijo tenga por lo menos una hora diaria de tiempo especial con usted, y asegúrese de que reciba manifestaciones de afecto o de cariño durante este período.

Así pues, el error más común que suele cometer algún padre o alguna madre es tratar de eliminar completamente ésta práctica de su hijo o de su hija. Esto desemboca en un conflicto en el que, inevitablemente, los padres pierden. Los niños nunca deben ser castigados; no se les debe gritar ni reprender al respecto. No se debe utilizar tampoco otra clase de restricciones ni calificar la masturbación como mala, sucia, perversa o pecaminosa. Todos estos enfoques sólo producen rechazo y resistencia. Y, posiblemente, inhibiciones sexuales más adelante.

En conclusión, esta información se proporciona como un criterio general de orientación y educación que no necesariamente se ajusta a cada caso particular. Consulte a su médico de familia o pediatra :

- Si su hijo sigue con esta práctica cuando hay otras personas presentes.
- Si el niño trata de enseñarla a otros.
- Si usted sospecha que alguien le ha enseñado a su hijo.
- Si usted no puede aceptar esta práctica de su hijo, de ninguna manera.
- Si a usted le parece que su hijo está triste.
- Si con este enfoque no se produce ningún cambio en un mes.
- Si usted tiene otras preguntas o preocupaciones.

Adaptado del Dr. B. D. Schmitt, autor del libro "Your Child's Health".